Iriarte, Ana y Luísa de Nazaré Ferreira (coords.), Idades e género na literatura e na arte da Grécia antiga, Coimbra, Imprensa da Universidade de Coimbra-Annablume, 2015, 215 págs.

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Ramíro González Delgado

Resumen

La colección Humanitas Supplementum, de la conocida revista conimbricense,
presenta bajo el número 34 un interesante y documentado estudio monográfico colectivo que analiza las ideas sociales que sobre edad y género se perciben en la Grecia antigua a través de diferentes fuentes literarias, iconográficas y epigráficas. Son en total siete contribuciones de investigadores de tres países: tres españolas, dos argentinas y dos portugueses (nacionalidad  del único autor). En conjunto, estamos ante un análisis que, dejando a un lado al varón griego adulto, atiende al resto de edades y sexos (niños, doncellas, ancianos y prostitutos).

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González Delgado, R. «Iriarte, Ana Y Luísa De Nazaré Ferreira (coords.), Idades E género Na Literatura E Na Arte Da Grécia Antiga, Coimbra, Imprensa Da Universidade De Coimbra-Annablume, 2015, 215 págs.». Noua Tellus, vol. 35, n.º 1, junio de 2017, pp. 157-61, doi:10.19130/iifl.nt.2017.35.1.760.
Sección
Reseñas bibliográficas
Biografía del autor/a

Ramíro González Delgado, Universidad de Extremadura

Doctor en Filología Clásica por la Universidad de Oviedo y licenciado en Filología Hispánica por la Universidad Nacional de Educación a Distancia, es profesor de Filología Griega en la Universidad de Extremadura. Sus trabajos de investigación se han centrado fundamentalmente en
la literatura y la mitología griegas, la tradición clásica y la historia de la literatura grecolatina, con varios trabajos publicados en estos campos.

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La colección Humanitas Supplementum, de la conocida revista conimbricense, presenta bajo el número 34 un interesante y documentado estudio monográfico colectivo que analiza las ideas sociales que sobre edad y género se perciben en la Grecia antigua a través de diferentes fuentes literarias, iconográficas y epigráficas. Son en total siete contribuciones de investigadores de tres países: tres españolas, dos argentinas y dos portugueses (nacionalidad del único autor). En conjunto, estamos ante un análisis que, dejando a un lado al varón griego adulto, atiende al resto de edades y sexos (niños, doncellas, ancianos y prostitutos).

El primer capítulo, “Semblanzas de semi-ciudadanías griegas: sobre críos, ancianos y féminas” (pp. 9-30), a cargo de una de las coordinadoras del libro, Ana Iriarte, catedrática de Historia Antigua de la Universidad del País Vasco, no sólo sirve para adentrarnos en el tema de la obra, sino que también hace las veces de presentación general del libro. En la introducción, la autora se detiene en las máscaras del teatro, que representan de un modo rígido las diferencias de sexo y edad (específicas según se trate de ἀνήρ, γέρων, νεανίας, γυνή o κόρη), y en la conocida ánfora ática de figuras rojas que representa a Aquiles y Áyax echando una partida, que revela entre ambos significativas diferencias de edad, para introducirnos en el tema de la obra que coordina (con dos ejemplos procedentes de la literatura y del arte): el interés del hombre griego arcaico por marcar tanto las diferencias de sexo como las de edad en un mismo género sexual. Por ello, enlaza esta presentación general con su contribución: “En capítulos posteriores, se precisarán otros tantos matices iconográficos con respecto al tema de nuestro libro colectivo, pero, para empezar a desbrozarlo, se impone acercarse a las fuentes literarias” (p. 11). En concreto, Ana Iriarte reflexiona sobre los límites de la ciudadanía y revisa un texto esencial para las categorías de edad y de género, el libro III de la Política de Aristóteles. A partir del concepto aristotélico de ‘ciudadanía plena’ (Arist., Pol., 3.1275a) analiza la noción de ‘ciudadano’, de la que se excluye radicalmente a la mujer (ni siquiera se la evoca) y, de un modo impreciso, se atiende a las distintas edades del varón con respecto al momento de su plenitud en Atenas: los niños que no han alcanzado la edad de alistarse y los ancianos retirados no son ciudadanos ‘de forma absoluta’ (oὐχ ἁπλῶς). Ciertamente, y ejemplificando más adelante con el enigma de la Esfinge de Tebas, la primera y tercera edad parecen carecer de importancia frente a la etapa en la que el individuo anda sobre dos pies. En este aspecto, la condición de ‘ciudadana’ era paradójica, pues “la mujer no participa directamente en las diferentes actividades que conlleva la πολιτεία, al tiempo que disfruta de un reconocimiento como ciudadana en la medida en que transmite dicho título a sus hijos varones” (p. 15). Más alejada del título de ‘ciudadana’ con plenos poderes, pero prometedora en cuanto a las funciones que realizará como tal, se encuentra la doncella (παρθένος). Esta etapa pre-matrimonial de la mujer griega es tan compleja e inquietante como la del efebo, su equivalente masculino, la autora profundiza en estas dos edades intermedias, para pasar después a la de los seres “balbuceantes y longevos”. Con ello, no sólo explora los espacios intermedios entre las categorías de edad y de sexo en relación con la organización social, sino también presenta el volumen que nos ocupa pues, no en vano, a lo largo de su contribución, remite a todos los trabajos presentes en la obra.

Margarita Moreno Conde, conservadora del Museo Arqueológico Nacional (España), en “Las edades de la vida: infancia y vejez a través de la iconografía griega” (pp. 31-60), documenta un amplio corpus de vasos griegos, en su mayoría procedentes del MAN, para atender a las representaciones iconográficas que de la infancia y la vejez, tanto en su vertiente masculina como femenina, se perciben en la Grecia de la Antigüedad, mostrándonos unas diferencias importantes entre hombres y mujeres en cualquier etapa de su vida. Este estudio iconográfico proporciona un buen acercamiento a esas dos edades en los márgenes de la vida, porque no nada más se representan en el mito, sino también en la vida cotidiana de una forma que, de otra manera, tal vez no llegaríamos a conocer. Así, por ejemplo, las fuentes literarias griegas abundan en referencias descarnadas a la tercera edad, mientras que la iconografía representa la degeneración física sin piedad. Con respecto al nacimiento, después de repasar varios testimonios iconográficos míticos, nos parece acertada la relación simbólica que establece entre una tradición de este momento vital con el futuro social del neonato:

Cuando nacía un niño, se colocaba sobre el umbral de la puerta una corona de olivo mientras que si era una niña se colgaba un copo de lana. Ambos símbolos representaban lo que se esperaba de ellos en el futuro. Para el niño, las glorias del ciudadano como si de un vencedor de Olimpia se tratase, para la niña, el trabajo doméstico en el interior del oikos (la casa) y en particular el trabajo del telar (p. 34).

El capítulo se completa con quince imágenes a color y de excelente calidad que contribuyen a una buena ‘visualización’ de las ideas expresadas en el texto.

En “Violência e infância na Grécia antiga: três aspectos de uma problemática” (pp. 61-88), Luísa de Nazaré Ferreira, de la Universidad de Coimbra y una de las coordinadoras de este volumen colectivo, se adentra en tres aspectos de maltrato infantil, en los castigos físicos que los niños recibían según las tradiciones literarias e iconográficas desde la Grecia arcaica hasta época helenística. Señala la autora que la violencia contra los niños está muy presente en la mitología, la literatura y el arte desde sus primeros testimonios. En primer lugar, se estudia a los niños víctimas de la situación de los adultos en la mitología, con varios ejemplos donde esa violencia pasa por la eliminación del ser: Crono y Medea hacia sus hijos, Atreo hacia sus sobrinos, los griegos con Astianacte… incluso niños expuestos para que pereciesen, como es el caso de Edipo o Paris. Además del tratamiento literario, como señala Luísa de Nazaré, “estas histórias exemplares da crueldade humana, onde a criança é muitas vezes a vítima principal, surgem desde muito cedo representadas nos frisos dos templos gregos” (p. 64), además de ser escenas recurrentes en la pintura de vasos, especialmente por influencia de la tragedia (recordemos, también, por ejemplo, a las doncellas sacrificadas Ifigenia o Polixena). En segundo lugar, se analiza la violencia cometida por los propios niños: a pesar de ser pocos los testimonios literarios e iconográficos, éstos son suficientes para comprobar que los griegos no fueron indiferentes al fenómeno de la agresividad infantil y juvenil, discutiendo si este tipo de personalidad tenía un origen natural o de instrucción. El tercer aspecto que se estudia es la violencia cometida contra los niños en un contexto educativo (tanto familiar como escolar), un maltrato entendido como ‘necesario’ por parte de los educadores para corregir comportamientos inadecuados durante su formación. Señala la autora que, en este tema, es notoria la ausencia de ‘niñas’ tanto en los testimonios literarios como iconográficos, ofreciendo explicaciones satisfactorias ante este hecho.

La profesora de la Universidad del Salvador (Argentina), Katia Obrist, en “El hogar campesino para la doncella en Trabajos y Días de Hesíodo” (pp. 89-107), analiza en esta obra hesiódica la asociación entre lo femenino y lo peligroso, analizando sus conexiones con otros aspectos, como la ideología del colectivo campesino al que pertenecía el autor, y los cambios en el espacio doméstico que se producen durante la época arcaica. La proximidad que establece el texto entre lo femenino y el espacio interior ya se encontraba en épocas anteriores (Penélope es un buen ejemplo), pero la autora incide en que la asociación que se establece con la mujer es algo nuevo y se ilustra muy bien en el episodio de Pandora; ésta, además de ser definida como un mal, pone fin a una edad y plantea nuevos retos, como es la llegada de la cultura (y sus instituciones de sacrificio, agricultura y matrimonio). Según esta interpretación, Hesíodo asocia mujer-cultura y varón-naturaleza, pero aproxima lo femenino a la tierra (la mujer debe domesticarse con la agricultura y el matrimonio) y el rito nupcial estaría destinado a preservar a la civilización del componente salvaje de la παρθένος, que se encontraría en un proceso de tránsito hacia la edad adulta, encarnando la liminalidad entre la fuerza salvaje de la naturaleza y la domesticadora cultura.

También argentina, de la Universidad de Buenos Aires, es la profesora Elsa Rodríguez Cidre, que en “Maneras rituales de matar a una doncella: Ifigenia entre las víctimas sacrificiales euripideas” (pp. 109-128), analiza la violencia ritual de la παρθένος en Ifigenia en Áulide de Eurípides, comparándola con otra víctima sacrificial presente en el corpus de este autor, la Políxena de Hécuba, entre quienes percibe diferencias fundamentales. El título del trabajo ya evoca la conocida obra de Nicole Loraux, Maneras trágicas de matar a una mujer, aunque aquí la autora considera la influencia social de la figura de la ‘doncella’, mostrando la violencia que suponen esos matrimonios sacrificiales. En este aspecto se reitera la vinculación que la cultura helénica establece entre las mujeres y el mundo animal, manifestada también en los distintos procesos de animalización que suelen experimentar los personajes femeninos en la tragedia. Ifigenia, la doncella sacrificada, objeto de agresividad, se convierte en generadora de la misma al compararse con su tía Helena, causante de innumerables muertes.

El profesor de la Universidad de Lisboa, Nuno Simões Rodrigues, en “Problemática da prostituição masculina na Atenas clásica” (pp. 129-166), a partir del mito de Céfalo y Procris, estudia el contexto (estableciendo coordenadas ideológicas, culturales y sociales) en que se desenvolvió la prostitución masculina en la Grecia antigua, en concreto, en la Atenas clásica. El autor tiene presente la problemática entre la ‘elitista’ pederastia y la homosexualidad, en especial las relaciones particulares que se establecen entre el erastes y el eromenos, con el fin de tener una mejor percepción a la hora de encarar la prostitución masculina. Después de un breve repaso a la prostitución femenina en Grecia, el autor se detiene en la figura del ‘chapero’, analizando su denominación, su estatuto y condición social (su oficio estaba regulado por el estado), los lugares que frecuentaba, su origen, su aspecto y modo de vida, su edad, los diferentes tipos de prostitutos… siendo consciente de lo parcas, fragmentarias y esporádicas que resultan las fuentes antiguas en relación con la realidad analizada. Para finalizar, el estudioso se detiene en el texto que más información aporta sobre el tema: el discurso Contra Timarco de Esquines.

El último capítulo “Eudaímones: dichosos ancianos del ática” (pp. 167191), firmado por la profesora Marta González González, de la Universidad de Málaga, se centra en los epigramas funerarios que celebran la longevidad mediante términos tan positivos como ‘envidiable’, ζηλωτός o εὐθανάτως, y, sobre todo, εὐδαίμων, adjetivo que sólo puede predicarse de quienes han muerto en edad avanzada. La autora ejemplifica con el mito de Titono para ver que, en la senectud, el vigor físico se va, pero permanece la voz; entonces repasa los estudios sobre la vejez en la Grecia antigua antes de detenerse en el material epigráfico y en las expresiones (bastante uniformes) que se emplean en los epigramas fúnebres que conmemoran a los más ancianos, tratando de recogerlos todos (seg 43.88, ceg 592, 13, 477, 524, 531, 541, 554, 563, 566, 574, 586 y 613). También analiza las imágenes de las estelas funerarias (en las que no hay elementos iconográficos claros que identifiquen a las ancianas) y el modo en que se representa la vejez de hombres y mujeres, estudiando la elegía de las edades de Solón y los versos 638-645 de la Lisístrata de Aristófanes.

La obra, impecablemente editada y que se encuentra disponible on-line <http://hdl.handle.net/10316.2/36605>, se completa con unos útiles índices tanto de pasajes citados de las fuentes de la Antigüedad como de nombres propios (pp. 193-210), además de ofrecernos una breve información de los autores de este volumen colectivo. Todas las contribuciones aparecen precedidas por un resumen y palabras clave, tanto en el idioma en que está escrito el trabajo (español y portugués) como en inglés, que dan cuenta de las líneas que se siguen en el trabajo y los aspectos considerados. Cada colaboración finaliza con una abundante, completa y actual bibliografía que muestra el interés que, en estos últimos años, suscitan los temas aquí estudiados.