Historia de la revista

El Anuario de Letras nace en 1961, en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México, por propuesta de su director de aquel entonces, el doctor Francisco Larroyo, con la finalidad de dar difusión a los trabajos de investigación de los académicos del área de Letras.

            Desde el primer momento, el doctor Juan M. Lope Blanch se hace cargo del Anuario, primero como editor y posteriormente como director, hasta su fallecimiento, en el mes de mayo de 2002. Durante esos más de 40 años, el Anuario publica artículos, notas y reseñas sobre lingüística y crítica literaria referentes a la lengua española y sus literaturas (española, hispanoamericana y mexicana). En las páginas de esos años aparecen muy importantes trabajos, no sólo de la planta de profesores de la Facultad y del Centro de Lingüística Hispánica sino también de otros renombrados investigadores, como por ejemplo Eugenio Coseriu, Kurt Baldinger, Rafael Lapesa, Agustín Millares Carlo, Ángel Rosenblat, Miguel León-Portilla, Raimundo Lida, Yakov Malkiel, Antonio Alatorre, Harri Meier, José Pedro Rona, Tomás Navarro Tomás, Fernando Lázaro Carreter, Manuel Alvar, Tomás Buesa Oliver, Margit Frenk, Joseph Matluck, Jorge Suárez, Yolanda Lastra y un largo etcétera.

            A partir del año 2002, la doctora Elizabeth Luna Traill asume la dirección de la revista, siguiendo el camino y las pautas marcadas por su fundador, el doctor Lope Blanch. Pero en 2010 el Centro de Lingüística Hispánica se plantea la necesidad de poner el Anuario al día en forma y contenidos. Se rediseñan portada y formato interior; para cumplir con los requisitos de indización, se modifica su periodicidad y se vuelve una revista semestral, dedicada a publicar –en lengua española—trabajos referentes a la lingüística y a la filología del español; se ajusta su nombre, para hacerlo más afín con los contenidos que publica y así, a partir del volumen correspondiente al primer semestre de 2013 aparece en su nueva época como Anuario de Letras. Lingüística y Filología, con una imagen renovada, más acorde con los tiempos que corren. Ya no es más la revista concebida  en la tradición de los anuarios de las universidades europeas, cuya finalidad era difundir los resultados del trabajo de sus académicos y crear vínculos con revistas afines  de otras instituciones educativas.

            Al mismo tiempo se diseña e implementa una página electrónica para la revista, se digitalizan todos los números desde el primero (de 1961) hasta el más reciente, lo que hace más accesible su consulta. Y el Anuario se empieza a publicar en dos formatos, papel y digital, éste último de acceso abierto y gratuito.

            La revista aparece regularmente dos veces al año (en los meses de enero y de julio). Se encuentra citada en múltiples bases de datos e índices internacionales (SciELO, MLA, Dialnet, Lingmex, DOAJ, Latindex, ERIHPLUS, anvur, DRJI, REDIB, HAPI, EBSCO, MIAR).

            Últimamente, hemos incursionado en las redes sociales (Facebook y Twitter), con la finalidad de acercar la revista a los lectores más jóvenes, estudiantes de carreras afines a nuestros contenidos.

            En fin, después de más de sesenta años de su fundación, podemos decir que el Anuario de Letras. Lingüística y Filología, se ha puesto al día y atraviesa por un buen momento en su historia.